Kaleb solo se alimenta de una fórmula llamada Elecare. Además que se le ha implantado un tubo en el ombligo que va directamente a su estómago, y que está conectado a una bomba que, lentamente, impulsa el líquido en su sistema digestivo, durante 20 horas al día.
Cuando Kaleb va a la escuela, su madre coloca la bomba en un backpack y es vigilado por una enfermera, quien retira la bomba durante el recreo para que Kaleb pueda jugar. El recipiente con la fórmula tiene que ser cambiado cada tres o cuatro horas, y es lo único capaz de mantenerlo con vida.
Durante las comidas, Kaleb mastica hielo picado para que los músculos de su mandíbula no se atrofien y hasta el momento los médicos no han conseguido gran avance, pero ayudemos a la familia de Kaleb que han abierto una página web (http://www.kalebsjourney.org/) para recaudar dinero con fines de investigación.
Y antes de juzgar a nuestros niños o mejor dicho sus niños :P tengamos en cuenta
esta historia ok.
Vía: Tecnoculto
0 comentarios:
Publicar un comentario
¿Quieres dejar un comentario? Great, solo espero que el formulario de comentarios de Blogger tenga misericordia con tu comentario y asi poder leerlo ya que en algunas ocasiones falla, pero dale deja tu comentario por que la intencion cuenta al menos en este blog.
Ademas que los comentarios despues de ser moderados, serán publicados a la brevedad o al menos eso espero, y quizás tambien te interese Suscribete a Daily of Christopher para recibir las actualizaciones por email.
Y te animo que antes de hacer una consulta por favor utiliza el buscador de arriba. Si aun asi necesitas preguntar algo no olvides tener habilitado tu perfil o dejar un enlace a tu web. Gracias